Vista del puerto de Beirut tras la explosión Foto: REUTERS/Mohamed Azakir
Israel ofreció al Líbano ayuda médica humanitaria a través de canales militares y diplomáticos internacionales. El Estado judío ofreció al Líbano a través de esos factores la absorción de heridos. El portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en idioma árabe expresó en un mensaje en Twitter que “es momento de dejar a un lado las disputas” y el presidente Reuvén Rivlin, declaró que “compartimos el dolor del pueblo libanés y les ofrecemos sinceramente nuestra ayuda en este momento difícil”.
El presidente norteamericano, Donald Trump, formuló inusuales declaraciones durante una conferencia de prensa. A pesar de que en el Líbano se ha dicho que se trató de un accidente provocado por la negligencia, el mandatario estadounidense expresó que “parece un ataque espantoso”.
“Me he reunido con algunos de nuestros grandes generales y ellos parecen sentir que lo fue. Esto no fue un suceso tipo una explosión industrial”, indicó Trump contradiciendo la versión de las autoridades libanesas.
“Esto parece que fue, según ellos [los generales], lo sabrán mejor que yo, pero parece que piensan que fue un ataque, fue algún tipo de bomba”, agregó el mandatario estadounidense, quien aseguró que su país está dispuesto a enviar ayuda al Líbano.
El primer ministro libanés, Hassan Diab, afirmó que “todo el Líbano está hoy destruido”, y prometió que los responsables del desastre serán castigados. Al menos 100 personas murieron y alrededor de 4.000 resultaron heridas a raíz de la explosión en el puerto de Beirut, que desató el caos en la capital libanesa. La energía eléctrica se interrumpió durante la evacuación de los heridos atrapados entre los escombros. A raíz del gran número de heridos, los hospitales están operando a decenas de personas en forma simultánea, algunos de ellos en los pasillos.
La Fuerza de Paz de Naciones Unidas en el Líbano (FINUL) anunció que algunos de sus miembros resultaron gravemente heridos por la gran explosión en el puerto de Beirut, que afectó a uno de sus barcos atracado en el muelle.
Una fuente política libanesa dijo que Israel no tiene ninguna relación con el incidente. Factores vinculados al grupo terrorista chií Hezbollah manifestaron que los reportes que sugieren que se trató de un ataque israelí no son ciertos.
El primer ministro libanés, Hassan Diab, reveló en una reunión con el presidente del país del cedro, Michel Aoun, que la causa de la devastadora explosión fue un cargamento sin custodiar de 2.750 toneladas de nitrato de amonio, que está desde hace seis años en un depósito sin tomarse las medidas preventivas.
El Consejo de Defensa Supremo declaró Beirut como “zona de catástrofe” así como el estado de emergencia durante dos semanas.
Pacífico Comunicaciones
Victor Villasante